El gremio de empleados judiciales de Mendoza ha iniciado junto a las autoridades provinciales la elaboración del primer convenio colectivo de trabajo para el Poder Judicial. Este proceso, que se extenderá durante un año, promete traer cambios fundamentales en la estructura y funcionamiento de la justicia provincial.

Entre las modificaciones más relevantes que se contemplan, destaca la mejora de las condiciones de ingreso al Poder Judicial, así como una carrera profesional más corta, ágil y transparente. También se espera una actualización en los requisitos para el ascenso, una mejora en la base salarial a través de un nuevo esquema de pirámide salarial y una revisión de las condiciones de las licencias laborales.

Las reuniones de trabajo se llevarán a cabo dentro de un marco convencional y constitucional, con la participación de representantes técnicos designados por las distintas unidades organizativas del Poder Judicial. El proceso se desarrolla bajo la premisa de la buena fe y el compromiso de todas las partes para estar a la altura de este desafío, sin caer en mezquindades.

Este convenio busca no solo adaptar el Poder Judicial a las necesidades actuales de los trabajadores, sino también garantizar un servicio de justicia de calidad para la ciudadanía, bien remunerado y eficiente. Desde el gremio subrayan la importancia de implementar una política de capital humano que reconozca el profesionalismo y la responsabilidad de un servicio tan importante como el de justicia, por lo que el enfoque en la transparencia, el orden y la profesionalización será clave en esta nueva etapa.

El cronograma de reuniones apunta a que sean periódicas incluyendo ya una próxima cita técnica el miércoles 28 de agosto la cual tiene como primer objetivo realizar un diagnóstico general de la planta de personal y las funciones de cada agente. Este diagnóstico será la base para construir el "esqueleto" del convenio colectivo de trabajo, un documento que se perfila como un hito en la historia del Poder Judicial de Mendoza.

Finalmente, desde el gremio señalamos que este proceso no solo se limitará a una modernización tecnológica, sino que también implicará repensar las funciones y responsabilidades del recurso humano, adaptando el sistema judicial a las demandas contemporáneas. "Estamos diseñando el futuro del Poder Judicial, y aunque existen intereses diversos, todos compartimos el desafío de modernizar un sistema que responda a las necesidades del presente y del futuro".

Este convenio colectivo es una oportunidad única para redefinir las bases del trabajo en el Poder Judicial mendocino, asegurando que las necesidades del sistema como las de los trabajadores sean atendidas en este nuevo marco de acuerdos.